martes, 23 de junio de 2015

Tertulianos

"Participar como tertuliano en televisión es mucho mejor que trabajar y se puede ganar mucho más dinero  que siendo reportero de guerra” dijo en 2013  el periodista Alfonso Rojo, como tertuliano y como  antiguo corresponsal en las guerras  del Golfo, Yugoslavia, Irak, Afganistán, etc. En esta peligrosa faceta adquirió fama internacional. La w.mcnbiografias.com cuenta que Rojo ofreció desde Bagdad  a toda Europa un seguimiento diario del conflicto. Se quedó solo como el único representante de la prensa internacional independiente  bajo el  el bombardeo constante de las fuerzas norteamericanas. ¡Enhorabuena!
Ahora, como tertuliano en los platós de televisión no cuenta la guerra, la hace contra los que discrepan de él. Dispara groserías. Siembra el coloquio de minas antipersonas. Chilla. Tanto que hasta la que fue su mujer le advirtió seriamente: ::“¡A mi no me grites, eh!”. Ocurrió en el programa de Ana Rosa. ¡Enhoramala!
Si en un mismo día zapeamos por la mañana nos econtraremos con un colega de Rojo: el director de La Razón, Francisco Marhuenda. Si curioseamos por la tarde, sale en la pequeña pantalla este mismo señor y por la noche no digamos. Su fama como tertuliano taquillero no ha llegado a ser internacional, a pesar de que pasa más tiempo en los platós que en el periódico. Su amante más conocido en política es Mariano Rajoy. No quiero pensar mal de Marhuenda, pero ¿y si no ha sido corresponsal de guerra porque le resultaba antieconómico?