Manuela Carmena: Querido Enrique la fiesta del Orgullo Gay (1 de julio) es una identificación de la ciudad con el Madrid de la libertad, de la diversidad y del desarrollo. ¿Vas a asistir también tú?
Tierno Galván: Respetada Manuela, nadie debe hinchar tanto su libertad que merme la del otro pues la libertad por natural razón a todos pertenece.
Manuela: Te voy a descubrir mi secreto: deseo que la fiesta del Orgullo Gay sea tan importante como la festividad de San Isidro.
Tierno: Estoy de acuerdo contigo en que la libertad de los instintos es una libertad respetable.
Manuela: Gracias, estimado Enrique.
Tierno: No he terminado. La libertad de los instintos no debe atentar a los modelos morales positivos de convivencia mayoritariamente aceptados.
En ese momento Ana Botella explicaba en la Plaza Mayor a una representación de fruteros de todas las Comunidades Autónomas de España que “si se suman dos manzanas, pues dan dos manzanas, y si se suman una manzana y una pera nunca pueden dar dos manzanas porque son componentes distintos” Se sumó a la reunión José María Aznar e invitó a todos a un café con leche.