jueves, 9 de abril de 2015

El Supremo ¿sensible a las protestas de asociaciones a favor de la custodia compartida?

Periódicos sevillanos se han hecho eco de la reciente sentencia del  Supremo revocando el fallo de la Audiencia de Sevilla que, en  2013, daba la custodia a una madre, porque la compartida no era la mejor solución, pensando en el menor, ante el importante nivel de conflictividad con el padre. Un año antes, un juzgado de primera instancia había concedido a la madre la custodia y al padre un régimen de visitas. 
El Supremo no piensa lo mismo que el juzgado y la Audiencia. Considera que las diferencias existentes entre los progenitores, que son profesores universitarios, son compatibles con la custodia compartida. (Efectivamente la sangre psicológica no llega al río. Perdón por esta metáfora nada jurídica).
En la sentencia se señala que el padre denunció a la madre porque cambió la cerradura de la casa. (¿Por miedo?) Ella fue condenada. (Permaneció cuatro días y sus noches en un domicilio familiar. La policía veló por su cumplimiento). El menor que tiene 7 años, según se lee en la prensa. Desconoce la condena.
El ponente de la sentencia es el prestigioso magistrado Francisco Javier Arroyo. Cuando presidía la Audiencia de Málaga intentó ser presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía al cesar Méndez de Lugo. Resultó elegido Lorenzo del Río.
En 2011 Arroyo fue nombrado magistrado del Supremo. Él lo consideró “un paso importantísimo, un autentico reto que me llega todavía joven” Tenía 55 años.
Por la revista Miramar sabemos sus aficiones: Jardinería. bicicleta, música, lectura, cine. Su película preferida es La Misión, porque es un apasionado de la Compañía de Jesús de la cual siempre le ha llamado la atención la capacidad que tienen para anticiparse al futuro. Su prioridad es la familia. (Y la custodia compartida, creo.)