viernes, 27 de junio de 2014

La Sal del Derecho

Sus colores eran el rojo fuerte, símbolo de la izquierda y el verde fuerte de la buganvilla, una de las plantas de su jardín. Dedicó su primer libro a sus padres. Trataba de la renuncia de derechos del trabajador. Del segundo recuerda el título: “Los trabajadores temporales, eventuales, interinos y temporeros” pero ha olvidado la dedicatoria. Antonio Ojeda Avilés es catedrático de Derecho del Trabajo desde febrero de 1984.
-¿Son los laboralistas la sal del Derecho?
-Somos uno de los grupos que más cerca estamos de la frontera de las preocupaciones sociales. Pero el momento ha pasado. Nos gustaría ser la sal del Derecho. De verdad que la idea me ha gustado mucho.
-¿Es difícil mantenerse íntegro en política?
-Sí, porque en todos los partidos te piden fidelidades absolutas y tienes que atarte al que está mandando en ese momento.
(Una de las obras del profesor Ojeda trataba de los programas contra el paro en los que el Gobierno español se había gastado billones de pesetas, apoyando a los empresarios con subvenciones,  bonificaciones fiscales y dinero para que creasen  empleo. ¿Para qué sirvió? “Para reforzar  la autoridad del empresario y quitar al trabajador  el  sentido de su estabilidad en el empleo”).