martes, 13 de mayo de 2014

A una amiga

La muerte está de pie en tu acera, así me lo has dicho. Sé que cuando sientas llegar a la dueña de la noche no te taparás la vida con las manos. Ni arrugarás la seda joven de tu alma. ¿Qué quieres que te cuente? Dentro del hospital hay la rutina de siempre: prohibido permanecer en los pasillos, ha muerto la anciana, que ingresó ayer, mientras sus familiares cenaban, por favor abandonen la habitación, ¡qué suerte! nos ha tocado la enfermera más agradable de la planta, hay dos camas libres, la muerte les ha dado el alta, los niños preguntan por ti, espera que venga el doctor, no te arranques eso de las venas… 

Fuera del hospital suenan risas, ambulancias inquietas, bares abiertos con ludópatas del barrio, ordenadores en marcha, cierre de cremalleras .bajando de un ascensor… Y ya nadie es concebido a la sombra de un almendro. Amiga querida, no temas irte, aquí somos tristeza.