La corrida se
celebraba en la Facultad de Ciencias de la Hispalense. O mejor dicho:
Comenzaba el IV ciclo de conferencias taurinas a cargo del periodista
Manuel Martín Ferrand como único espada. Hubo lleno hasta la bandera,
pero sin llegar a la reventa. Lo patrocinaba Radio Sevilla para
recaudar fondos con destino a la promoción 69-74 de Químicas. En
barrera Pepe Luís Vázquez y otras caras conocidas. En el tendido
muchos estudiantes y aficionados a la fiesta. Todos aguantaron hasta
la salida de vaquillas, que corrió a cargo de los componentes de la
tertulia taurina de la emisora patrocinadora del acto.
Martín Ferrand
saludó a la afición y enseguida comenzó su faena sobre “El lenguaje
político de los toros”. Un espectador que estaba a mi izquierda comentó: “Martín Ferrand dirá lo mismo que cuando habla del lenguaje
político del hockey sobre hierba”. (Por favor, más bajo, que se le oye
todo).
Éste hombre tenía razón porque el conferenciante dijo: “Algún
día podré demostrar en un libro, que estoy preparando, cómo el Atlético
de Bilbao ha ganado algún campeonato de liga nada más que para evitar
que algunos se den a los desmanes”. Más adelante afirmó que sólo los
toros han abierto una compuerta para la incorporación del proletariado
a un nivel de vida alto, lo que no es obstáculo para considerar al
torero como una figura del subdesarrollo. Y añadió que despierta un
tufo reaccionario confundir la fiesta nacional con el españolismo, las
virtudes raciales o la virilidad.
En esta simbólica corrida Martín Ferrand no se abstuvo de asegurar que determinadas damas de la aristocracia española han pagado bien los favores que el proletariado les ha hecho en el terreno de lo íntimo. No se oyeron silbidos.
En esta simbólica corrida Martín Ferrand no se abstuvo de asegurar que determinadas damas de la aristocracia española han pagado bien los favores que el proletariado les ha hecho en el terreno de lo íntimo. No se oyeron silbidos.