miércoles, 6 de noviembre de 2013

Con la acuarela se puede robar un sueño a la realidad y magnificarlo (1)

El pintor Pedro Orozco me cuenta que vive  en un lugar rodeado de agua  por los cuatro costados. Ve dos continentes, un océano, un mar y tres reinos. Y el sol desde su salida a cota absoluta cero, hasta su puesta a la misma cota.
-¿Allí naciste?
-Si. Tengo la suerte de ser de Ceuta, nacido en 1959 y descendiente de una familia afincada en esta ciudad desde hace 200 años y oriunda del Valle de Orozco (Vizcaya). Como decía el poeta López Anglada: “Ceuta es pequeña y dulce… Ceuta es una andaluza niñería que, si saltar pudiera, saltaría la comba de agua y sal del océano”. En Ceuta me casé, trabajo y vivo feliz con mi familia, dando gracias a Dios.
-¿Y qué has hecho como artista?
-Desde esa posición española privilegiada he podido observar y estudiar durante mucho tiempo ese espectro completo de luz que nos ofrece el sistema para tratar de expresarlo con la acuarela.
-¿Por qué con la acuarela?
-Pues, como bien decía Nuria de Madariaga, periodista amiga y crítica de arte: "No existe expresión de delicadeza más bella que la acuarela. Con ella, somos capaces de robar en un instante un sueño a la realidad y magnificarlo".
-¿Viendo tus pinturas se puede sospechar que eres arquitecto?
-Cuando pinto edificios, es segura dicha sospecha. Mi formación académica en dibujo es importante y conlleva temas aprendidos relativos a la proporción, el conocimiento de las construcciones y la  perspectiva.