lunes, 9 de abril de 2012

Necesitamos un gobierno estable que tienda al progreso y a la innovación

-¿Qué has pescado hoy en facebook?, Carlos.
-Uso a diario de las redes sociales, tanto FB como Twitter. Es un tipo de comunicación diferente pero no menos real. Encuentro amigos a los que había perdido la pista, me acercan artículos de prensa que no había leído, cojo música y leo y escribo con cierto desahogo. O sea que estoy al ojeo.
Carlos Rosado Cobián, que mira poco hacia atrás, está satisfecho con las cosas que ha hecho, con los errores que le ha dado tiempo rectificar y con los valores a los que se ha mantenido fiel.
-¿De ellos cual es el que más practicas?
-Mi independencia personal.
-¿A qué te aproximaste cuando te alejaste de la política?
-Yo era abogado cuando llegué a la política y volví a mi profesión cuando la dejé. Me especialicé en Derecho del Audiovisual y en esta actividad he estado todos estos años. Ahora estoy centrado en mi actividad como  presidente de Andalucía Film Commission, una entidad encargada de atraer rodajes audiovisuales a Andalucía y rentabilizarlos como herramientas de promoción de su territorio y de su industria.

-¿Tu pleito inolvidable?
-Un abogado suele acordarse de todos sus pleitos, ganados o perdidos. Pero si me pides uno, por sus particulares circunstancias, te citaré el pleito en que defendimos Javier Arenas y yo a Pedro Pacheco cuando fue cesado como vicepresidente de la Caja de Ahorros de Jerez. Y, además, lo ganamos.
-¿El más discreto de tus amigos?
-Mira, yo tengo una nómina pequeña pero confortable de amigos que al no pertenecer a mi  misma actividad ejercen su amistad con discreción. Y así me gusta mantenerlos. Aunque discretos de verdad solo conozco a los políticos que han tenido responsabilidades como Javier  Torres Vela.
-¿El más sincero?
-Aunque no me gusta la sinceridad como arma arrojadiza e innecesaria debo pensar que todos mis amigos lo son en su amistad conmigo. Aunque ser sincero en exceso te acaba convirtiendo en un tipo intratable.
-¿El más divertido?
-Teniendo en cuenta que me divierte sobremanera una buena conversación y un debate en el que la política esté por medio, mis amigos más divertidos son aquellos con los que debato de las cosas que pasan. Debo advertir que entiendo que me preguntas tantos por amigos como por amigas. Y las respuestas valen para ambas.
-¿Están en buenas manos las televisiones privadas en España?
-Si consideramos que estar en manos del mercado es estar en buenas manos, la respuesta debe ser positiva porque las cadenas privadas controlan el mercado publicitario que les permite importantes beneficios. Desde el punto de vista de los contenidos, eso ya es otra cosa, pero no difieren en nada de la programación de las cadenas privadas de nuestro entorno.
- ¿Qué harías con las televisiones autonómicas?
-Además de las dificultades que han aflorado por la crisis económica, las televisiones públicas autonómicas que nacieron cuando ni siquiera había televisiones privadas deberán ajustarse a un modelo más ligero, menos rígido y eficiente.
-¿Desde el punto de vista de la programación?
-Aunque lo intentan, deben dibujar su perfil diferenciado de las televisiones comerciales ofreciendo un servicio público menos dependiente de la audiencia como consumidora de  publicidad. Hay cosas que la televisión pública ya no tiene que hacer porque está suplida suficientemente por las cadenas privadas o por las televisiones locales
-¿Por ejemplo?
-No tiene sentido dejar en las retransmisiones de futbol tantos recursos.
-¿En qué deben ser líder?
-En innovación, en materia audiovisual, usando cuantos soportes estén disponibles.
-¿El  Estatuto de Autonomía?
-Después de tantos años de vigencia del Estatuto de Carmona, Andalucía dispone de un nuevo estatuto, recién aprobado, acorde con los tiempos que cuenta con pleno respaldo parlamentario y es instrumento eficaz para el ejercicio político de la autonomía andaluza.
-¿Qué es lo que se necesita?
-Un buen gobierno que sea estable y que sepa imbuir a toda la sociedad andaluza de la necesidad de tender a la excelencia, al progreso y a la innovación.
-¿En qué has mejorado con el tiempo?
-Debo pensar que si no he malgastado mi vida, en algo debo haber mejorado. Es cierto que la edad pule aristas, templa el carácter y hace más comprensivo al individuo ante la naturaleza humana y en eso he mejorado, espero.
-¿Es larga la lista de tus miedos?
-No. Es más bien corta. No tengo fobias. Ya no le temo al fracaso vital. Y no le temo a la muerte sino a la pérdida de la memoria que me ha sido tan útil o a una enfermedad que sin quitarme la conciencia no me permita vivir dignamente e independiente.