domingo, 28 de agosto de 2011

Los derechos del lector

Encontrar a un niño de tres años y medio con un libro en las manos en tiempo de vacaciones no es un hallazgo fácil. Y si le preguntas ¿qué haces, Javi? y no te responde es que está muy concentrado. Hay que aprovecharse de la situación, hay que asaltar su intimidad. Lo fotografío con el móvil. Miro el resultado: él ha salido muy bien y también la portada del libro. Se titula “La comunicación no verbal”. A este paso puedo lograr que el niño hable por señas y me cuente con la mirada y con las manos quién le ha puesto en contacto con la obra que aparentemente lee. Al no recibir señales de vida, comienzan mis sospechas. ¿Qué experimentará y hará con sus pensamientos este pequeño impostor? Resuelto. Se sentía autorizado a cumplir una importante misión: distribuir las letras del libro en dos cucuruchos. En uno echaría las que se pareciesen a la “seño” de la guardería que no sabe reír. 
Por este motivo permanecerían atadas a la portada del libro hasta que la leyese el oso Winnie el próximo invierno.
Las del otro cucurucho saltarían alegres al recreo. Allí Javi Barrero y sus amigos Alexandre y Antonio jugarían a formar palabras. La tarea resultó difícil porque por falta de material sólo consiguieron una de dos sílabas: mamá. Todos se conformaron. Eran las reglas del juego.
Javi sabe contar hasta diez mientras sube o baja la escalera de su casa en buena compañía. Diez como los dedos de sus manos dotados de prodigiosa capacidad para transformar en inservible un bolígrafo, una libreta o una lupa. Diez como los mandamientos. Él cumple con generosidad el cuarto, salvo en algunas ocasiones en que, a la hora de comer, el apetito está en el tejado de su memoria y no quiere bajar.
Por ahora Javi desconoce los derechos del lector que ideó el profesor de literatura  Daniel Penna: derecho a saltarse las páginas, derecho a no terminar un libro, a leer cualquier cosa, a releer, a hojear simplemente, a leer en cualquier lugar. A él le leen cuentos mientras está sentado pacientemente en el W.C.