jueves, 31 de marzo de 2011

Carlos Funcia: "esta página no se hackea"

A mediados de abril, cuando la primavera hace estragos en los alérgicos, una cita, como si fuera la primera, para los periodistas. Para esta ocasión llegan a tiempo las palabras poéticas de Carlos Funcia. Periodista sin antecedentes penales ni amistades manifiestas en el denominado piso patera. 

-¿A la presidencia de la APS  le ha ocurrido, en todos los tiempos, lo que al mendigo de la leyenda, que estaba sentado en un cajón y no sabía que dentro había un tesoro?
-En tiempos pretéritos usaron el tesoro con fines nefandos. Ahora, efectivamente, no saben que hay tesoro, se quedan sólo con las filigranas de cartón de la caja, con las andas…

- ¿Los mensajes de las tres candidaturas sensibilizan de algún modo a  los compañeros?
-Aquí también veo fondo y forma. Creo que Rafa Rodríguez sí sensibiliza el fondo: su programa es participativo, elaborado con decenas de aportaciones. Otras (candidaturas) creo que se quedan en la espuma, en las pompas.

¿Qué sabes de los que hace cuatro años no consiguieron ganar?
-Tengo excelentes relaciones con algunas de ellos/as. Con otros, cero.

¿Cómo está el clima electoral?
-Muy animado, con mucha expectación. Esta página (en la que puede entrar y opinar cualquiera) tiene casi 100 amigos, miles de visitas y no se hackea. En la campaña cada cual se muestra exactamente como es. Y como la mayoría de asociadas/os tienen talento y uso de razón, sabrán distinguir perfectamente la paja del grano, el hueso del jamón.

- ¿Lo ultimo que has hecho como interventor?
-Enviar un escrito a la Mesa Electoral y de Foto Fija para el making-off del video de la candidatura de Rafa, que mañana mismo podrá ver y opinar quien lo desee (no sé si he dicho que en esta página puede entrar cualquiera…)

- ¿Se juega mucho la APS el 14 de abril?   
-Se juega mucho la profesión; se juega poner por delante el buen periodismo, distinguir lo Veraz de lo Verídico, separar información de opinión, contrastar. Se juega un buen Colegio de Periodistas, por el que llevan años luchando compañeros de toda Andalucía, especialmente los de Cádiz y Málaga. Se juega nada menos que el futuro.