El Ayuntamiento de Sevilla ofreció el 21 de abril de 1936 un almuerzo al presidente de la República, Diego Martínez Barrio, que comió con frac y sin condecoraciones. Durante el banquete la Banda Municipal interpretó fragmentos de zarzuelas y varias sardanas en honor de otro ilustre invitado: Lluís Companys, presidente de la Generalitat. No hubo brindis, pero sí himnos. La banda interpretó ´”El Segador” y después el himno de Riego. Los asistentes escucharon en pie ambas composiciones. Los dos presidentes se dirigieron después a la “Unión Radio” que se encontraba en la carretera de Miraflores. La comitiva oficial no se cruzó con un fugado del manicomio. La Guardia Civil lo encontró herido cerca de Carmona. Al ser interrogado, el hombre no habló. Al final escribió en un papel sus datos personales y enseguida los agentes se percataron de que era mudo.
(Menú del banquete: consomé doble en taza, caviar del Guadalquivir, filete de lenguado y pulardas…)
En la foto Juan Espadas que en 1936 no era ni un proyecto soñado. Su abuelo Manolo, funcionario del Ayuntamiento, fue represaliado, según contó el nieto en el Diario de Sevilla.