lunes, 20 de junio de 2011

La ruta de la seda y el percal de los políticos

24 de mayo de 2011.Los acampados del 15 M en Oviedo invitaron a Eduard Punset a hablar con ellos. El les dedicó estas palabras: Gracias por mantener viva una esperanza que llevamos cultivando desde hace mucho tiempo. Pensad en cómo eran las cosas hace 2.000 años. Intentaban unir Roma con Oriente mediante la famosa ruta de la seda, en la que la gente intercambiaba conocimientos, chismorreos, infecciones, genes. Y de allí, con mucho tiempo,  surgía una civilización nueva y una manera de pensar. Y en eso estáis vosotros. Lo que antes se tomaba  en 1.000 años, ahora gracias a Internet y a las redes sociales se toma en 1.000 días.
Cuando salía de la Plaza de la Escandalera de Oviedo, una de las indignadas mostró a Eduard Punset uno de sus libros para que se lo dedicara. El autor escribió “No paréis” y dijo a la joven: gracias.  Todavía sonaban los aplausos de los acampados.
Año 1970. El profesor Enrique Tierno Galván está en Sevilla. Hacía cinco años que fue expulsado de la Universidad por apoyar las protestas estudiantiles contra el régimen de Franco. Tuve la suerte de conversar con él en el Club Vida de los Jesuitas en la calle Trajano, antes de que se dirigiera a las numerosas personas que llenaban el salón. La conferencia había sido organizada por el Club Gorca.     
─¿Añora la Universidad?
─A la Universidad en abstracto, desde luego que la añoro. Fueron muchos años de dedicación a ella.
─¿Y en concreto?
─Hablándole con absoluta lealtad, a la Universidad actual, inquieta, dominada en muchos casos por la Administración, con situación equívoca, partida y, sobre todo, con una libertad minimizada, a esa Universidad no la añoro.
─¿Cómo se siente fuera de ella?
─Más libre que dentro.
─¿De quiénes está más cerca el intelectual español, de los de arriba o de los de abajo?
─Es difícil responder a una pregunta formulada en términos tan rígidos.
─¿En dónde está la dificultad?
─En que la definición de intelectual es muy compleja.
─¿Cómo lo define usted?
─Es la persona cuya función consiste en problematizar sobre la realidad.
─¿Qué tal es la realidad española?
-─Mucho más problemática en lo que se refiere al futuro.
─¿De quién depende más el futuro: de la clase dirigente o de la dirigida?
─Hoy por hoy, parece que depende de la clase dirigente, por eso el intelectual está problemáticamente más cerca de ella: se mueve en su ámbito, conoce más o menos sus problemas y  participa de sus usos y costumbres.
─Ahora, imagínese al intelectual como un ciudadano cualquiera.
─Como miembro de una sociedad en que está instalado, el intelectual está mucho más próximo a los de abajo.
─En resumen...
─El intelectual, como problema, observa a los de arriba; el intelectual, en cuanto hombre, está más cerca de los de abajo.
─¿Cómo puede servir el intelectual a los dirigidos?
─Dándole claridad bastante para que comprendan que están en condiciones de pedir, e incluso exigir, los derechos y las garantías de estos derechos que muchas veces se les niegan; iluminándoles para que comprendan que están en condiciones de exigir que la fórmula "los de abajo" empiece a perder vigencia.
─¿Y a los dirigentes?
─Demostrándoles que el camino que mejor puede servir a sus intereses y a sus principios morales (en la medida que los de arriba poseen tales principios) es el camino de la coincidencia en la igualdad de oportunidades democráticas y en un fundamento común de solidaridad humana y no en el seudofundamento de privilegios infundados y de garantías para unos y temores para otros.
─¿Se comprometería con los de abajo?
─Si es necesario, sí.
─¿Y con los otros?
─Aunque sea negativamente, hostilmente.
─¿Cómo se puede practicar en España lo de dar de comer al hambriento, y de beber al sediento?
─Me pide usted que en medio minuto le exponga un programa político.
─El tiempo lo ha marcado usted, don Enrique.
─Me pide más: un programa moral... Creo que se puede practicar como en todo el mundo...
─Concretando...
─Abriendo el camino a la posibilidad de que todos participen en las decisiones del poder, abriendo el camino a la democracia...
─¿Adónde nos conducirá este camino?
─A una sociedad en que la igualdad socialista sustituya al privilegio por la satisfacción y la alegría de la solidaridad de una vida común...
─¿Quiénes pueden desear esto?
─Toda persona que tenga una conciencia moral pura o relativamente pura.