Un político hablaba con Dios y el otro político con el cura.
Los dos eran italianos y coincidían con frecuencia en la misma iglesia. El primero se apellidaba De Gásperi y fue uno de los padres fundadores de la Unión Europea. El que hablaba con el cura era Andreotti, siete veces primer ministro gracias a la mafia. También era militante de la Democracia Cristiana, partido fundado por De Gásperi.
El periodista Montanelli contó lo de la iglesia y se le ocurrió lo de Dios y el cura. La ocurrencia provocó el ingenio de Andreotti que dijo al periodista: Tiene usted razón, pero por lo menos a mí el cura me contesta.
(Foto de Juan Pablo II con el mafioso Andreotti)